Aromaterapia con Flores de Bach, poderes combinados
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Se puede combinar la aromaterapia con Flores de Bach, pero es necesario conocer qué diferencias tienen ambas terapias y cuáles son los beneficios específicos de cada esencia floral y de cada aceite esencial
El aceite esencial (aromaterapia) es una sustancia vital aromática que se encuentra en las flores u otras partes de una planta. Es una mezcla de diversos componentes que están presentes en el vegetal, y que después de extraídos forman un compuesto extremadamente concentrado.
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Una esencia floral (Flores de Bach) no tiene aroma, perfume o componente químico de la planta. Es una impresión de la fuerza vital de ese vegetal cuyas vibraciones sutiles no son percibidas por los cinco sentidos. Es una forma muy diluida de extracto de una planta, hecha normalmente en agua, extremadamente delicada.
Orígenes de la aromaterapia y de las Flores de Bach
El estudio terapéutico de los óleos esenciales (Aromaterapia), es conocido desde hace mucho tiempo, ya hay registros en la medicina ayurvédica y en la medicina china. Grecia y Egipto también documentaron usos rituales de los óleos esenciales para la salud y la espiritualidad, ofreciéndoles a los dioses. En la historia del cristianismo, es muy importante el uso de los aromas, como por ejemplo el incienso y la mirra.
En la década de 1920, en medio del boom de la industria farmacéutica, el químico francés René Gattefossé usó el término aromaterapia por primera vez, estudiando el potencial curativo de los óleos esenciales. Las Esencias Florales fueron desarrolladas por el médico Edward Bach, en la década de 1930, en Inglaterra, inspiradas en las clásicas tradiciones homeopáticas.
Para el Dr. Bach, lo que debería ser tratado es la personalidad de la persona, no la enfermedad. La enfermedad sería el resultado de un conflicto entre el alma (Yo Superior – la parte más perfecta del Ser) y la personalidad (Yo Inferior – lo que somos, en nuestro día a día).
Cómo se preparan
Para la fabricación de un óleo esencial (Aromaterapia), la planta pasa por un proceso de extracción, que normalmente se realiza por arrastre a vapor o prensado en frío (en el caso de los cítricos). Su proporción en la planta es muy pequeña (0,1% a 1%, en promedio), normalmente se utiliza una gran cantidad de materia vegetal para su fabricación.
En la preparación de las Flores de Bach, no se perturba a la planta. La mayoría de las veces, se usa de una a tres flores en agua pura para preparar lo que se denomina “esencia madre”, exponiendo ese preparado a los rayos solares. La esencia madre se diluye posteriormente para preparar las esencias de acción. Esta preparación es ritual, una unión especial entre el preparador y la “conciencia” del reino de la naturaleza.
Combinación de la aromaterapia con Flores de Bach
Se puede combinar la aromaterapia con Flores de Bach para obtener resultados curativos en diversos aspectos de nuestra vida, en los cuales nos sentimos afectados. Esta combinación de terapias se utiliza aromatizando los ambientes de un lugar, para así obtener los beneficios de ambas terapias.
Un ejemplo para atenuar las influencias de malas vibraciones ajenas se puede combinar Agrimony, Centaury, Holly y Walnut (Flores de Bach) con los aceites esenciales de cítricos en general, naranja, Azahar, Anís, Enebro, Jazmín y Rosa.
Otro tratamiento bastante eficaz, que se utiliza para aliviar dolores musculares y calambres, es masajear la zona afectada utilizando una crema a base aceites esenciales como: Enebro, hierbabuena, y melisa. Combinadas con las flores de Bach: Red Chestnut, Willow, Vine, Impatiens y Vervain, ideales para relajar y calmar el dolor.
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