4 ideas para conectar con la naturaleza sin salir de casa
Estar mucho tiempo en casa puede hacerse complicado por muchos motivos, y uno es, sin dudas, la falta de contacto con la naturaleza. Quienes tienen parque pueden solucionar este problema con cierta sencillez, acostándose en el pasto, caminando descalzos, disfrutando de los días más cálidos. Pero muchas personas no cuentan con esa posibilidad y, sin poder ir a espacios naturales, pareciera que algo importante nos falta. Conectar con la naturaleza sin salir de casa parece difícil.
Sin embargo, no es imposible. Hay muchas maneras de atraer un poco de naturaleza a nuestra propia casa y así sentirnos más felices. Porque no caben dudas de que el ser humano necesita ese contacto para estar bien.
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Entonces, estas son algunas ideas de cómo conectar con la naturaleza sin salir de casa que pueden interesarte.
Cómo conectar con la naturaleza sin salir de casa
Poner comederos de aves
Lo ideal es hacerlo en un árbol, pero si tienes un balcón, o un pequeño patio aunque no tenga verde, también sirve. Se trata de colocar pequeños cuencos con sustancias que atraen a las aves por su olor o sabor, y de ese modo tener siempre cerca a estos animalitos que nos alegran el día.
Algunas ideas para hacer esto son:
- Hacer un cestito colgante con cáscaras de naranjas. Para ello, hazle unos agujeros a una cáscara de naranja y cuélgala usando cuerda de algodón. Haz también algunos agujeros en el fondo para que no se acumule el agua de lluvia.
- Con el mismo procedimiento anterior, puedes colgar corteza de coco.
- Cuelga una redecilla y pon dentro cacahuates o semillas para aves.
Plantas de interior
Esto es un clásico, pero no por ello menos eficiente. Las plantas de interior no sólo decoran el ambiente. También purifican el aire, y ayudan a la productividad, a la concentración y a reducir el estrés. En un contexto de encierro, tener verde dentro de casa es la mejor idea.
Lo mejor es que hay todo tipo de plantas de interior. Los helechos y las suculentas son clásicas, pero hay para todos los gustos.
Salir a ver el cielo nocturno
No importa si tienes sólo un balcón o incluso apenas una ventana. Todas las noches, haz el ejercicio de asomarte un momento para ver el cielo. El cielo diurno es lindo, pero el oscuro cielo nocturno tiene una magia fabulosa.
Mirar las estrellas y la luna por un rato te ayudará a recordar que somos pequeños en un universo que es mucho más grande que nosotros.
Aprovecha el aire y las horas de sol
Lo más importante de todo: no dejes de aprovechar el aire y las horas de sol. Es una tentación estar todo el día acostado, pero durante el día, aireate lo máximo posible, abre puertas y ventanas, si puedes salir a algún espacio abierto hazlo. Saluda al sol, aunque haga frío.
Aunque llueva, aunque sea un momento, asoma la cabeza al exterior y respira profundo. Respira el aire fresco y recuerda que hay naturaleza allí afuera aún y que pronto podrás salir a disfrutarla.
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