Escaneo corporal: descubre cómo recorrer mentalmente tu cuerpo
Conocernos a nosotros mismos es el mejor punto de partida para la búsqueda de un conocimiento superior. Entrar en contacto con el cuerpo y el propio ser aumentará nuestra autoestima a la hora de enfrentarnos al mundo. El escaneo corporal es un ejercicio del mindfulness que nos ayudará a ello.
Se trata de un tipo de meditación mediante la cual es posible conectar con el cuerpo y descubrir nuestro estado de salud. Su práctica permite entrenar la mente para vivir el aquí y el ahora con plena atención, sin emitir ningún tipo de juicio. Al observar de manera equilibrada es posible tomar distancia emocional y somos capaces entonces de decidir cuestiones importantes con la efectividad necesaria.
El escaneo corporal es un tipo de meditación muy poderosa y sanadora. Gracias al recorrido mental que se hace por todo el cuerpo podemos concentrarnos plenamente en el presente.
Actitud para practicar el escaneo corporal
Hay que mantener la concentración durante todo el recorrido mental por el cuerpo. Debemos alejar cualquier tipo de pensamientos o ideas. Además:
- Es muy importante disponer la mente para que podamos percibir hasta el detalle más insignificante que sintamos por nuestro cuerpo;
- Inicialmente, debido a la falta de experiencia, nos podemos apoyar en las meditaciones guiadas. Sin embargo, conforme pase el tiempo tendremos que aprender a realizar el escaneo corporal de manera independiente.
Pasos a seguir en el escaneo corporal
- Empezamos por los dedos del pie izquierdo para seguir a continuación por el resto del pie, subimos por la pierna (tobillo, canilla, pantorrilla, rodilla, rótula, muslo, ingle y cadera). Todo ello recorriendo cada parte profundamente con la mente.
- El siguiente paso es comenzar por el pie derecho y hacemos el mismo recorrido que el realizado en la otra pierna.
- Una vez finalizadas ambas piernas le toca el turno a la parte pélvica, incluyendo otra vez ambas caderas, las nalgas y los genitales.
- Seguimos por la zona lumbar, abdomen y torso superior (parte superior de la espalda, tórax, costillas, pecho, corazón y pulmones).
- El escaneo corporal llega hasta las venas y principales arterias situadas en la caja torácica. Luego sigue por las clavículas y los hombros.
- Se puede escanear corporalmente los dos brazos a la vez, comenzando por las puntas de los dedos hasta terminar a los hombros (palmas, reverso de las manos, muñecas, antebrazos, codos, parte alta de los brazos, axilas, hombros).
- Por último llegaremos al cuello y la garganta. El final del escaneo corporal tendrá lugar en la cara y la cabeza.
Ser capaces de concentrarnos y percibir profundamente las sensaciones corporales gracias nuestra propia voluntad es un hecho extraordinario. No hace falta movernos. Gracias a este tipo de meditación seremos capaces de llevar nuestra mente a cualquier parte del cuerpo.
Podemos practicar esta meditación imaginando que nuestro cuerpo es un instrumento musical. Con la ayuda del escaneo corporal lograremos afinarlo como corresponde. El nivel de precisión de la afinación dependerá de la prisa que llevemos a la hora de hacer el escaneo por el cuerpo.
Es posible realizarlo tanto en la cama, como sentado o incluso estando de pie. El momento del día también puede ser el que más nos convenga. La clave es tomar conciencia corporal en el momento en el que se realiza el escaneo. Una acción que nos permitirá también conocernos profundamente a nosotros mismos.
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