Freya: la diosa nórdica del amor y la fertilidad
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Freya es conocida como la diosa del amor, de la fertilidad y de la belleza. Es una deidad muy procurada para asistencia y protección durante los partos. También podía contribuir para que las estaciones climáticas no fueran tan extremas. Pese a que estaba asociada con el romance, se dice que Freya no era apacible. Era hermana de Frey e hija de de Njord y Nerthus. En Alemania, era identificada bajo el nombre de Frigg.
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Cómo estaba representada Freya
Freya era representada con un casco y un cosolete, además de un escudo y lanza. La parte inferior de su vestimenta correspondía a la de una mujer normal. También se le distinguía por sus ojos de color azul profundo y cabellos dorados.
De acuerdo a la tradición, transportaba a los muertos hasta el lugar donde serían agasajados, lugar conocido como Folkvang y en el que los familiares acudían para compartir con su ser amado aún después de la muerte.
Freya y su gran amor por Odur
Freya estaba casada con Odur, quien era considerado como su punto de equilibrio y de quien ella estaba profundamente enamorada. La sonrisa que le distinguía provenía precisamente de Odur.
Un día, Odur decidió vagar por el mundo. Freya, desconsolada, lloró amargamente al extremo que se piensa que varias de sus lágrimas se quedaron entre las piedras en forma de oro y otras tantas cayeron al mar y formaron piedras de ámbar.
En medio de toda su tristeza, Freya decidió buscar a su esposo por todo el mundo por lo que fue conocida ampliamente bajo otra denominación como Mardel, Horn y Syr. Finalmente, Freya consiguió a su amado y emprendió el camino de regreso a casa. Tal fue su alegría que a su paso todo floreció y la naturaleza ante tanta alegría.
Odur era considerado como una personificación del Dios Sol, pero precisamente por toda la pasión desenfrenada que desató en su amada, también era un símbolo de sensualidad y pasión. Precisamente por sus dotes tan requeridos por los amantes, muchas veces su nombre era incluido en la letra de numerosas canciones.
En la religión nórdica, Freya ocupa un lugar privilegiado al igual que Frigg. El culto por su figura era tal que ocupaba un sitial de honor en el templo Ölvusvatn, junto a Thor y Freyr. Los templos en su honor fueron múltiples. Se dice que por órdenes del Emperador Carlomagno fue destruido el último que estaba construido en su nombre, ubicado en Alemania.
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