5 hábitos que debilitan el campo energético
Existen muchos hábitos que debilitan el campo energético. Los pensamientos negativos y obsesivos si son habituales por ejemplo, gastan mucha energía, pensar demasiado y la forma de hacerlo puede dejarnos agotados al final del día. Por ello tenemos que saber cuáles son y cómo evitar algunos hábitos que debilitan nuestro campo de energía.
Todo depende de la energía. Un coche, por ejemplo, sólo se conduce correctamente si todas sus partes están en orden, si la cantidad de aceite es la adecuada, si hay suficiente agua en el motor y si tiene combustible. Sin embargo, cuando algo falta o si algún componente se ha mezclado con cualquier elemento extraño puede dañar el coche y no tener energía para andar.
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Hay agentes externos que pueden interferir, incluso chupar nuestra energía. Hay personas, por ejemplo que son verdaderos «vampiros energéticos«. Reunirse con personas como estas, pesimistas o tóxicas es uno de los hábitos que debilitan el campo energético. Muchas veces estamos muy bien y después de juntarnos con cierta persona quedamos desanimados y sin energía.
Algunos comportamientos y actitudes que parecen habituales e insignificantes podrían afectar tu capacidad de actuar, absorber tu energía y quitarte la paz interior. Debes abandonar algunos malos hábitos que debilitan el campo energético para tener una mejor calidad vida.
5 hábitos que debilitan el campo energético
1. Adicción a estar conectado
Una adicción verdaderamente perturbadora de nuestra era, causada por la necesidad constante de estar en línea. Ya sea un correo electrónico, redes sociales o hacer clic en una aplicación de mensajería, te convierte en un esclavo de tu dispositivo.
Los teléfonos celulares y otros dispositivos nos permiten estar en varios lugares y hacer varias cosas al mismo tiempo, nos ayudan a resolver varios problemas de manera efectiva, nos mantienen informados sobre los problemas del mundo, nos permiten hacer algunas compras, comunicarnos con amigos y familiares etc. pero ser un rehén de algo es preocupante, vivir constantemente online puede ser una verdadera prisión si no sabes administrar tus tiempos.
Intenta promover lo más posible el contacto físico y mental, en lugar de mantenerte en contacto solo con tu pantalla táctil. La próxima vez que tengas la necesidad de abrir una red social o una aplicación de mensajería para distraerte, piénsalo dos veces. ¿Qué tal dar un paseo o hablar con un amigo en persona? Te garantizamos que será mucho más gratificante. Equilibrar lo real y lo virtual.
2. Un estilo de vida sedentario
Puede parecer paradójico, pero cuanto menos te muevas, te sentirás más perezoso y agotado. El cuerpo de una persona sedentaria probablemente lo que hace durante el día a día es sentarse a tomar un café, coger un ascensor, sentarse en una silla de oficina, coger el ascensor de nuevo, volver al coche y sentarse al final del día en el sofá mirando la pantalla del televisor con un mando a distancia.
Si encajas en este perfil, tu cuerpo está muriendo lentamente. La actividad física permite activar la circulación y acelerar el metabolismo, así como oxigenar el cuerpo, lo que, a su vez, hace que tus órganos vitales funcionen mucho mejor.
3. Malos hábitos de sueño
Otro de los hábitos que debilitan el campo energético es tener un mal dormir. Mientras dormimos, nuestras células del cuerpo se regeneran, se producen nuevos tejidos, la frecuencia cardíaca se ralentiza y el cerebro registra eficazmente lo que ha estado absorbiendo a lo largo del día en la memoria a largo plazo.
Así que cuando no duermes lo suficiente, tu cuerpo se siente frágil y cansado. Si dormir mal se ha convertido en un hábito, ya lo sabes: esta es la principal causa de fatiga y falta de energía. Un adulto debe dormir al menos 6 horas por noche para recuperarse. Respeta esto y te estarás respetando a ti mismo.
4. No ser capaz de desconectar antes de ir a dormir
Cuando estás debajo de las sábanas antes de dormir, tu cuerpo y tu mente necesitan desconectarte de los problemas y encontrar un lugar acogedor para descansar. Este momento es crucial para nuestro cuerpo y para nuestro cerebro.
Hábitos como revisar tu teléfono celular (otra vez), dormir frente al televisor o pensar en las tareas del día siguiente no le dan espacio a tu cerebro para descansar. No trates de resolver los problemas del trabajo, pagar las cuentas imaginariamente desde su cama. Esto agotará tu sistema nervioso.
En su lugar, disfruta haciendo cosas más livianas si no consigues dormite de inmediato. Lee un libro (por supuesto, no un libro técnico), habla con tu pareja (si la tienes) o simplemente apaga la luz. Apágate, literalmente.
5. Mucha cafeína y azúcar
A veces bebemos demasiadas bebidas con cafeína o azúcar como una forma sencilla de estimular los músculos y mantenernos despiertos. Estas dos sustancias pueden mantenernos despiertos y con energía, pero nuestro cerebro está en una especie de ‘piloto automático’. Disminuye nuestra creatividad, la capacidad de tener nuevas ideas y producir conocimiento. ¿Qué tal cambiar la cafeína o el azúcar por actividad física?
Dormir más. Apagar el teléfono y tratar de desconectarte de tus preocupaciones, aunque sea por un corto tiempo. Vive aquí y ahora. Revisa estos 5 hábitos y trata de hacer transformaciones, notarás que tu energía aumentará.
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