7 hábitos zen que cambiarán tu vida
Admiras a personas que parecen vivir en un estado de paz interior, que son muy amigables, empáticas y bondadosas. Pareciera que nada las perturba y transmiten una energía positiva hacia los demás. Muchas de estas cualidades se deben a los hábitos zen, diversos hábitos que han adoptado para encontrar la tranquilidad mental y un camino de desarrollo que les permite vivir más felices.
Ninguna de esas personas que tienen estas características nació así, es decir, no venía genéticamente formateada de esa manera, aunque sabemos que hay personas más tranquilas por naturaleza, muchas de las cualidades que han desarrollado se deben a hábitos zen que han incorporado a sus vidas y que a continuación te contamos para que evalúes si pueden incorporarlos también a la tuya.
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Los hábitos zen que cambiarán tu vida
1. Pon atención a la respiración
Muchas veces no ponemos atención al cómo estamos respirando, ¿tenemos una respiración corta y agitada, rápida como si estuviésemos cansados, nos cuesta respirar? Pocas veces sabemos cómo estamos respirando y es fundamental para tener control de la mente y el cuerpo.
Uno de los hábitos zen es poner atención a la respiración, primero observarla, saber cómo habitualmente respiramos y luego modificarla hasta que la práctica se torna un hábito y la incorporemos a nuestra vida. Lo ideal es tener una respiración tranquila y profunda para tener un cuerpo y una mente tranquilos y controlados.
2. Cambia las creencias sobre ti mismo
Si sigues repitiendo frases como yo soy mal genio, o tengo mala suerte u otras frases que crees de ti mismo no podrás evolucionar ni vivir en armonía. Hay determinadas características negativas que tenemos y dentro de los hábitos zen, no se trata de luchar contra ellas, sino observarlas comprenderlas y luego potenciar las características positivas.
Cambiar las creencias sobre sí mismo es darle más luz y energía a aquello que crees de ti mismo que te traer más felicidad, que te da una sensación de unidad y de coherencia, por sobre lo crees de ti que te causa contradicción y desintegración.
3. Modifica tu mirada
Trata de modificar tus puntos de vista, para ello tienes que tener mucha atención a tu interioridad y al mismo tiempo al mundo que te rodea, no perderse ni en lo externo ni en lo interno, encontrar el equilibrio simultáneo de percibirse y percibir el mundo.
Al modificar tu mirada podrás ver temas importantes con otra óptica, por ejemplo, el sufrimiento puede ser un aviso de que necesitas cambiar la dirección de tu vida, si estás sufriendo es porque la vida te está avisando para que hagas modificaciones drásticas o parciales, pero que no puedes seguir de la misma manera, en este sentido es un aprendizaje y una ayuda.
4. Vive en armonía con la vida
Esto significa vivir en armonía con todos los seres del universo, comenzando por los seres humanos hasta el elemento más modesto. Ningún elemento del universo es descartable y todos tienen su valor y su sentido de existencia.
Si comprendes que hasta los opuestos son necesarios para un equilibrio, podrás dar un gran paso para adquirir uno de los hábitos zen más importantes.
5. Vive en alegría
Tanto externa como internamente debes tener una actitud alegre y optimista. Desde una simple sonrisa hasta estados de felicidad profundos son experiencias necesarias para tener paz interior.
En el camino del desarrollo personal y la evolución es necesario tener una postura optimista de todo el proceso que se debe recorrer para alcanzar la felicidad plena, por lo tanto, cada paso que se dé en este caminar es también una huella de alegría que se debe ir dejando.
6. Vive el presente
Otro de los hábitos zen es vivir el momento presente, sin olvidar el pasado ni el futuro, pero tampoco dejando que estos dos tiempos sean los que se impongan en el momento presente.
Esto se relaciona con el tema de la atención, cuando atendemos a algo debemos estar en el momento presente para poder ver con claridad lo que acontece y que no se filtren imaginaciones y recuerdos que tiñan esa percepción. Sin duda que siempre habrá datos de memoria y de imaginación actuando en el momento presente, pero es vital saber que esos datos son sólo datos y no la realidad que se está viviendo en el momento presente.
7. Medita
La meditación es unos de los hábitos zen más importantes para mantener un equilibrio mental, emocional y espiritual. La meditación no es un estado quieto ni de silencio total. Si bien se necesitan momento en soledad y sin ruidos e interferencias externas para que haya una buena meditación, el acto de meditar no es de una conciencia en estado de reposo.
La conciencia cuando medita es cuando está más activa que en vigilia, porque busca la profundidad, además busca acallar los ruidos mentales para poder ir a lo fundamental.
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