Hexagrama cuarenta y seis: crecimiento
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El hexagrama cuarenta y seis es conocido como Sheng o la subida, y es uno de los hexagramas más significativos por simbolizar una semilla que crece en la tierra.
Los estudiosos del I Ching asemejan este hexagrama a una escalera con su peldaño y de ahí la interpretación del ascenso, el cual puede ser exigente pero con constancia y dedicación se logrará llegar a lo alto de la escalera.
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Trigramas que componen el hexagrama cuarenta y seis:
Sheng se compone de los trigramas Kun y Sun. Kun, en la parte superior, se conoce como lo receptivo, es decir, recibe la fuerza creadora y la transforma, es suelo fértil que hace crecer la semilla.
Kun también se asimila con las madres en cuyo vientre crecen los hijos.
El consejo principal de Kun para los consultantes es el de ceder y colaborar, dar para poder recibir.
Por su parte Sun, la suavidad, sugiere actuar con prudencia y no dejar que la fuerza se imponga.
Sin embargo cuando se encuentra el trigrama Sun en un hexagrama también puede significar que el consultante actúa de manera caprichosa y es indeciso, lo cual le puede acarrear problemas o no alcanzar sus objetivos.
Elementos del hexagrama cuarenta y seis
El hexagrama cuarenta y seis está conformado por tierra en la parte superior y madera en la parte inferior.
El elemento tierra significa solidez y nutrición para los proyectos, por eso cuando hablábamos de Kun lo asemejábamos con las madres como pilar de la vida y de la familia.
La tierra le señala al consultante que debe actuar con lealtad hacia él mismo, sus convicciones y además ser leal frente a las otras personas.
Por su parte Sun, que es madera, simboliza crecimiento, cuando se encuentra algún trigrama de este elemento la recomendación para el consultante es que actúe de manera compasiva y con benevolencia y evite la ira.
Cuando analizamos la posición de los elementos en el hexagrama cuarenta y seis encontramos que la tierra está sobre la madera, en principio podría decirse que hay un agotamiento de la madera; sin embargo, como en la tierra se siembra la semilla para que crezca y se afiance, la interpretación de los elementos del hexagrama cuarenta y seis nos permite señalar que hay una relación de crecimiento (de ahí su nombre).
La semilla sembrada en la tierra fértil va creciendo con constancia y paciencia y el árbol que de ella nace va alcanzando su altura; esa es la interpretación general de este hexagrama, que aplicado al consultante quiere señalarle que no se rinda y se esfuerce, pues con tenacidad alcanzará el éxito.
Interpretación de Sheng y sus líneas
Como se ha señalado en otros artículos relacionados con el I Ching y sus hexagramas, la interpretación de la lectura se hace a partir del hexagrama base y se complementa con hexagramas nucleares, predictivos y línea o yao mutante, esto permite ampliar la interpretación y los consejos para el consultante.
El hexagrama cuarenta y seis, desde su nombre, deja claro que el progreso y éxito están garantizados para el consultante, siempre y cuando actúe de manera correcta (el I Ching es enfático en señalar que siempre las actuaciones rectas son las que permiten alcanzar el éxito y la consecución de lo propuesto).
La primera línea le asegura al consultante que sin importar las circunstancias actuales alcanzará el éxito, siempre y cuando sea modesto y precavido para evitar cualquier accidente o imprevisto y además esté convencido de que puede lograr lo que se ha propuesto.
La segunda línea reitera el yao anterior y le recuerda al consultante la necesidad de ser persistente y efectuar los sacrificios necesarios para alcanzar sus objetivos. Igualmente debe ser flexible para afrontar el ascenso.
La tercera línea plantea cambios venideros, los cuales no siempre serán exitosos, pero no hay por qué alarmarse pues la situación mejorará pronto y hay que aprovechar la buena ventura por la cual se está pasando. Ser cuidadoso, precavido y analizar cada paso que se da permitirá superar los inconvenientes que se puedan presentar.
La cuarta línea también es muy favorable, muestra mejoras laborales pero de nuevo le recuerda al consultante que debe actuar correctamente y darse el valor que se merece. Las personas que aprecian al consultante lo protegerán y le ayudarán en su ascenso.
La quinta línea completamente favorable para quien efectúa la consulta muestra el éxito garantizado cuando hay paciencia, cuidado y perseverancia en las actuaciones.
La última línea muestra cómo el árbol ha afianzado sus raíces y crecido hacia el cielo, así serán los proyectos del consultante que ha seguido los consejos y actuado con prudencia, benevolencia, paciencia y perseverancia.
Si quien efectúa la consulta lo hace con intenciones de conocer sobre su situación sentimental, el hexagrama cuarenta y seis le augura una buena y sólida relación amorosa, siempre y cuando, al igual que los árboles cuya semilla crece en la tierra, se cultive y alimente para que crezca fuerte.
Si la consulta se hace por un motivo de salud, deberá tenerse en cuenta que la recuperación será más lenta de lo esperado pero será eficaz.
En conclusión este hexagrama le recuerda al consultante que si quiere lograr sus objetivos debe ser constante y exigirse todos los días para poder “ascender”, al igual que una planta que lucha por crecer.
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