Hipomancia, cómo adivinar con ayuda de caballos

Los sistemas utilizados por los seres humanos para intentar predecir el futuro son de lo más variado. Desde analizar el sonido del agua o las ondas que genera una piedra lanzada a ella. A observar la llama de una vela o interpretar el canto de un gallo. La Hipomancia es otro sistema de adivinación que estudia en este caso la manera de actuar de los caballos.

Es un tipo de adivinación cuya práctica es más habitual en zonas rurales donde existe numerosa presencia de este tipo de animales. Los persas y los antiguos griegos ya practicaban la Hipomancia. El famoso historiador griego Herodoto (siglo V antes de Cristo) reflejó en uno de sus escritos como los persas eligieron al emperador Darius siguiendo las indicaciones de sus sacerdotes. Aquel candidato cuyo caballo relinchase primero al romper el alba sería proclamado emperador.

Los antiguos germanos también recurrieron a la Hipomancia para conocer los mensajes de los dioses. Tácito, importante historiador romano, además de senador, cónsul y gobernador, lo recoge en Sobre el origen y territorio de los germanos. Tras atar los caballos al carro sagrado, el sacerdote interpretaba los resoplidos y relinchos. Resultaban un mensaje claro que provenía de los dioses, ya que estos animales ejercían de sus confidentes.

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Interpretación de los movimientos en la Hipomancia

Los hipomantes se fijan en la posición de la cola del caballo mientras corren libremente. Según la coloquen de una manera u otra pude significar que se aproxima mal tiempo, como tormentas o huracanes.

Los relinchos de los caballos también resultan muy importantes. En función de la hora en que se hayan realizado indicarán acontecimientos diferentes. Si se produce por ejemplo entre las dos y las tres de la mañana lo que nos indican es que ha muerto un familiar o alguien cercano. Con sus relinchos también indican la presencia de fuegos cercanos o la detección de un temblor de tierra.

Los accidentes de tráfico de sus dueños los perciben los caballos horas antes de que sucedan. Mostrarán hasta ese momento un comportamiento errático y agresivo. Incluso si se acerca al caballo una persona malvada pueden percibir su energía negativa y se muestran nerviosos. Permanecen quietos si detectan un peligro inmediato.

Así, cuando notan la presencia de serpientes en el camino evitan atravesar por determinados lugares. Lo mismo sucede si perciben que un río va a sufrir una crecida considerable en unas horas, no lo atravesarán.

La Hipomancia es un sistema de predicción que se basa en interpretar los movimientos de los caballos para saber lo que puede suceder poco tiempo después.

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