Ofanines, mensajeros de la Sabiduría Divina

Los ofanines u ofamines son las criaturas angélicas encargadas de transmitir los mensajes divinos, a través de señales externas, o en sintonía con la voz interior del sujeto (intuición).

No todos los autores creen en la existencia de los ofanines, como miembros de la Jerarquía Angelical; algunos especialistas los identifican con los Tronos (encargados de sostener el trono de Dios), o como una parte de éstos.

De acuerdo con este planteamiento, los ofanines serían las ruedas que impulsan el movimiento del trono y el carro divinos, y a la vez, ángeles en adoración perpetua al Creador.

Los místicos hebreos reconocen a los ofanines, y les atribuyen la función de difundir el conocimiento; y guiar a las personas en el camino hacia la sabiduría (aplicación práctica de lo aprendido).

Igualmente, estos ángeles propician el vínculo con el verdadero potencial del ser; y distribuyen sus mensajes utilizando la inspiración, la intuición, la fe y, en algunos casos, las habilidades psíquicas del destinatario.

De la misma forma, existe la creencia de que los ofanines son los guardianes de las estrellas y las constelaciones; además de ejecutores de las leyes universales, y guías en la comprensión de la voluntad divina.

Los tronos y los ofanines

Como fue indicado anteriormente, algunos autores y especialistas en Jerarquía Angelical identifican a los ofanines y los Tronos, como el mismo grupo de criaturas celestiales.

No obstante, mientras las la funciones de los primeros están relacionadas con la difusión de la Sabiduría Divina; los Tronos se presentan como seres en contemplación del Creador, y símbolos de la serenidad.

En el artículo Ángeles Tronos: Donde descansa Dios, publicado por WeMystic, se explica que los Tronos son invocados para aclarar malentendidos, establecer jerarquías, y consolidar vínculos de diferente naturaleza.

Asimismo, se indica que los Tronos están relacionados con los dones de: respeto, rendición, reconciliación, plenitud, desapego, libertad, armonía, humor, exquisitez, discernimiento, autoridad, y sentido estético.

En el mencionado escrito, se incluye una plegaria, para solicitar los dones y la protección de los ángeles Tronos, la cual se transcribe a continuación:

“Oh Señor, santísimo creador de todos los reinos visibles e invisibles,
que con misericordia inigualable nos brindas los infinitos tesoros de tu amor,
pese a todos mis pecados”.

“Asísteme para poder plasmar y corporizar, por la acción de tus santos ángeles Tronos, mis buenos deseos y proyectos personales, en el plano espiritual y material”.

“Ayúdame a concretar este humilde pedido (exponer la intención), y dar forma a cada logro verdadero en mi camino, iluminado/a por la eterna luz que derrama el fuego sagrado de tu amor. Aleluya, Aleluya, Aleluya. Gloria al Señor. Amén”.