Ojo de gato: la piedra del equilibrio mental y espiritual

Aunque se la conoce también como crisoberilo, la piedra ojo de gato hace honor a su nombre. Parece realmente el ojo de este felino. Un ojo de gran dureza que puede encontrarse en diversos colores, como el verde, el marrón, el azul o el amarillo. En todos los casos su característica fundamental es la línea divisoria central que la cruza en vertical.

Su origen hay que buscarlo en las cristalizaciones de prismas rectangulares de terrenos graníticos. Lo podemos hallar en Estados Unidos, Brasil, los Montes Urales o en la isla de Ceilán. Dentro de sus variedades las que más demanda tienen son el Topacio oriental (color amarillo) y la Crisolita oriental (color verdoso).

Propiedades energéticas y espirituales

• El poder que irradia favorece la fortaleza de espíritu. Por eso resulta muy positivo llevarla siempre encima. Este vigor espiritual guarda relación con la gran dureza de la piedra que se sitúa en el 8,5.
• El ojo de gato ayuda también a conseguir el equilibrio mental y espiritual. Al alejarnos de las malas vibraciones y las enfermedades el poseedor de la piedra puede relajarse. De esta manera impulsa su autocontrol y disciplina. Cuando mente y espíritu se equilibran la paz interior aparece.
• Es una piedra que está vinculada con los chakras del tercer ojo y de la garganta.
• Favorece la concentración personal, además de atraer a la fortuna y al éxito. En numerosas culturas se utiliza el ojo de gato como regalo destinado a la gente que hace negocios. La suerte les sonreirá desde entonces.
• Antiguamente, en ciertas culturas, era un regalo muy común para los niños pues servía para prevenir sucesos inesperados y accidentes.
• Protege contra el mal de ojo y la envidia. Resulta una piedra muy efectiva a la hora de atraer el amor o la amistad.

Propiedades curativas del ojo de gato

• Se utiliza para tratar problemas relativos a la respiración y el cerebro. Ejerce de estimulante que permite abrir la mente y fomentar la creatividad. Con su ayuda logramos tener claridad de ideas.
• Ayuda a recuperar la energía vital y a hacer frente a los problemas relacionados con la depresión.
• Facilita la recuperación de los problemas oculares. Puede incluso favorecer la mejora de la visión nocturna.

Para que todas estas propiedades puedan aprovecharse al máximo hay que conservar la piedra ojo de gato en las mejores condiciones. Debemos evitar rayarla pues, a pesar de su dureza, pierde sus propiedades. Tiene más efectividad si la llevamos en el lado derecho de nuestro cuerpo.

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