Salmo 142, la plegaria de un perseguido
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Los Salmos son un conjunto de alabanzas, suplicas y acción de gracias, dirigidas a Dios o Jehová (Yahveh). Estos textos, escritos en clave poética, están contenidos en el Antiguo Testamento de la Biblia. En esta oportunidad, les hablaré sobre el Salmo 142.
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¿A qué se refiere el salmo 142?
La Biblia de Jerusalén titula al Salmo 142 como “La plegaria de un perseguido”, ya que el Rey David sentía una profunda soledad al ser perseguido por sus enemigos de y abandonado por sus compañeros mientras se encontraba en Absalón, por lo que encontró refugio en una cueva.
Su espíritu se encontraba desmayado, pero de repente le llegó un rayo de esperanza a su situación ya que sabe que Dios conoce su camino aunque esté lleno de trampas por el enemigo, por lo que se da cuenta de que puede descansar en Dios, ya que solo él es el que concede y supervisa su camino aunque los demás lo hayan abandonado.
Este Salmo nos recuerda que si alguna vez a nadie le importe lo que nos sucede, no debemos desfallecer ya que a Dios si le importa por lo que siempre nos ayudará y nos hará prosperaren cualquier ocasión siempre y cuando dejemos nuestra fe puesta en el, ya que por muy oscuros que sean los momentos que ahogan nuestra alma, mientras tengamos a Dios en nuestro corazón. Ya que las situaciones adversas solo son recordatorios de que Dios se manifiesta constantemente y de muchas formas, haciendo que olvidemos todo tipo de resentimientos hacia nuestros semejantes recordando de que Dios se preocupa verdaderamente por nosotros.
El Salmo 142 indica la urgencia del clamor en medio de la angustia y la soledad, ya que Dios oye y quiere escuchar de voz de sus hijos cuales son las angustias que los abordan. Es por ello que este Salmo apela al amor y misericordia de Dios expresando con franqueza lo que se siente en esos malos momentos para apartar la vista de ellos y depositarla en la confianza hacia el.
El ritual de meditación del Salmo 142 consiste en recitarlo oralmente mientras pensamos en lo que nos aflige, ya que los sentimientos de angustia representan el primer paso hacia la recuperación y salida de nuestra situación actual mediante el amor de Dios, ya que aunque nos encontremos cercados por el mal, siempre estaremos protegidos por el bien.
A continuación, se transcribe integro el texto del Salmo 142 de la Biblia Católica, indicado para realizar el ritual descrito en las líneas anteriores.
Salmo 142
1 Con mi voz clamaré a Jehová;
Con mi voz pediré a Jehová misericordia.
2 Delante de él expondré mi queja;
Delante de él manifestaré mi angustia.
3 Cuando mi espíritu se angustiaba dentro de mí, tú conociste mi senda.
En el camino en que andaba, me escondieron lazo.
4 Mira a mi diestra y observa, pues no hay quien me quiera conocer;
No tengo refugio, ni hay quien cuide de mi vida.
5 Clamé a ti, oh Jehová;
Dije: Tú eres mi esperanza,
Y mi porción en la tierra de los vivientes.
6 Escucha mi clamor, porque estoy muy afligido.
Líbrame de los que me persiguen, porque son más fuertes que yo.
7 Saca mi alma de la cárcel, para que alabe tu nombre;
Me rodearán los justos,
Porque tú me serás propicio.
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