Salmo 150, alabar a Dios con instrumentos de música
Los Salmos son un conjunto de alabanzas, suplicas y acción de gracias, dirigidas a Dios o Jehová (Yahveh). Estos textos, escritos en clave poética, están contenidos en el Antiguo Testamento de la Biblia. En esta oportunidad, les hablaré sobre el Salmo 150 que pone broche final a este hermoso libro que forma parte de La Sagrada Biblia.
El Salmo 150 lleva como título “Alabar a Dios con instrumentos de música”.
¡Suscríbete a nuestra newsletter!
¿Te encanta la astrología? ¡Recibe contenido exclusivo!
Lee también: Conoce los salmos de protección
Características del Salmo 150
En la Biblia de Jerusalén es un poderoso llamado a la alabanza, La senda de la alabanza. Los Salmos concluyen con una poderosa apelación a alabar al Señor.
Unos salmos constituyen gritos de desesperación, otros están llenos de agradecimiento y algunos contienen instrucciones, basadas en la teología o en la historia, de “alabar a Jehová” por su ser, santidad, poder o benignidad. Pero el clímax se alcanza con un mandato a alabarlo a través de la música.
Para analizar este último Salmo podemos fijar la atención en que Dios se agrada de una alabanza en sincronía con los instrumentos, ir al son de ellos es en el tono y ritmo que cada uno marca en forma conjunta. Cada elemento musical tenía un momento especial de uso en el culto y un lugar específico y su uso era armónico y traía paz al alma, igual que lo traen hoy. Esta es la razón muy importante de reconocer que cada instrumento debe ser usado en el momento oportuno y adecuado.
El Salmo 150 nos cuenta que la música y los cánticos eran parte integral de la adoración en el Antiguo Testamento. El Rey David introdujo la música en los servicios del tabernáculo y del templo. La música debió haber sido fuerte y de regocijo como da muestra la lista de instrumentos y la presencia de coros y directores de canto.
El ritual del Salmo 150 se debe realizar con música estruendosa para bendecir las fiestas y darle la bienvenida a la liturgia del domingo dentro de la iglesia ya que el dolor humano no es ajeno a la alegría desbordante de amar a Dios.
A continuación, se transcribe integro el texto del Salmo 150 de la Biblia Católica, indicado para realizar el ritual descrito en las líneas anteriores.
Salmo 150
1 Alabad a Dios en su santuario;
Alabadle en la magnificencia de su firmamento.
2 Alabadle por sus proezas;
Alabadle conforme a la muchedumbre de su grandeza.
3 Alabadle a son de bocina;
Alabadle con salterio y arpa.
4 Alabadle con pandero y danza;
Alabadle con cuerdas y flautas.
5 Alabadle con címbalos resonantes;
Alabadle con címbalos de júbilo.
6 Todo lo que respira alabe a JAH.
Aleluya.
Te puede interesar: