Eruv, el sistema judío para cargar objetos durante el Shabbat
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Las diferentes religiones existentes en el mundo poseen ciertas normas, en algunos casos verdaderamente estrictas, que sus fieles están obligados a respetar. La religión judía tiene varias de este tipo, siendo una de ellas la prohibición de cargar y transportar cualquier tipo de objeto de un lugar a otro durante la celebración del Shabbat. Para solventar esta situación nació el Eruv.
Está claro que la imaginación al servicio de la fe permite realizar determinadas actividades sin necesidad de incumplir ningún precepto de la religión que se practique. En el caso del Eruv, se trata de un sistema de cables metálicos que permite a los judíos transportar cualquier clase de objeto por un perímetro establecido, convirtiéndolo en un espacio privado donde comunicarse con los demás miembros de la comunidad.
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De esta manera no se falta al obligatorio descanso que debe practicarse durante el Shabbat o bien en cualquier otra celebración judía, como puede ser el Yom Kippur. Los objetos que se pueden desplazar a través de los cables pueden ser cosas de tamaño insignificante como una llave o más grandes, como por ejemplo un carrito de bebé. El significado de la palabra Eruv es reunión, mezcla o asociación.
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El Eruv que rodea Manhattan
La comunidad judía de Nueva York dispone en Manhattan del peculiar sistema de cableado transparente llamado Eruv. Un perímetro que permite a los judíos ponerse en contacto entre ellos en días de celebraciones especiales en las que no se puede cargar ni transportar ningún objeto.
Cada Eruv posee un cerco físico, el cual normalmente se ajusta el sistema de cableado de servicio público existente en la zona. Además, se hace siempre una comida comunitaria en el interior del perímetro en eventos importantes de su religión, como el mencionado Shabbat o el Shavuot.
Este efectivo sistema de cables transparente sirve para juntar desde un pequeño grupo de edificaciones, hasta un barrio o incluso toda una ciudad.
Mantenimiento del Eruv
En el caso de Manhattan, los jueves de cada semana un rabino inspecciona el sistema de cables, comprobando que no existan roturas ni desperfectos durante todo su recorrido. Si esto ocurre, un equipo de expertos en la materia se encargan de repararlo antes de que se produzca el atardecer del viernes, que es cuando comienza la celebración del Shabbat.
Pese a ser un sistema en apariencia frágil, lo cierto es que ha sobrevivido a peligrosos fenómenos naturales, como puede ser el huracán Sandy.
Por lo que si un día paseas por una ciudad y ves un sistema de cables que forman perímetro concreto por el que se transportan objetos, estarás sin duda ante el peculiar sistema judío del Eruv.
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