El síndrome de burn out ¿Estás fundido en el trabajo?
En estos tiempos que corren aceleradamente, podemos sufrir malestares de diferentes tipos, uno bastante habitual es el síndrome de burn out, conocido como quemado o fundido en el trabajo o simplemente un alto estrés laboral.
¿Qué es el síndrome de burn out?
Si alguna vez has tenido la sensación cada mañana de tener que hacer una fuerza sobrehumana para ir a trabajar; y una vez que llegas al empleo no tienes energías, observas la lista de tareas por hacer y te sientes atrapado como un hámster en una jaula con el único deseo de salir de allí, probablemente puedes estar sufriendo del síndrome de burn out.
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En mayo de 2019, la Organización Mundial de la Salud incluyó una definición actualizada y mucho más detallada sobre el burn out. Anteriormente se definía solo como un «estado de agotamiento vital», ahora se clasifica con el concepto de «un síndrome, producto del estrés crónico en el lugar de trabajo al que no se lo puede controlar».
La OMS enfatiza que este tipo de agotamiento está específicamente relacionado con el trabajo (no debe aplicarse para describir experiencias en otros campos de la vida) y se caracteriza por:
- Una sensación de agotamiento o fatiga
- Distancia mental, negatividad o rechazo al trabajo
- Disminución de la efectividad en el trabajo
Esta nueva descripción hace eco de algunos temas comunes en los que la mayoría de los investigadores y expertos tienden a ponerse de acuerdo.
«El síndrome de burn out es cuando alguien se siente agotado de hacer las tareas en cuestión», dice Alice Domar, PhD, Directora del Centro Domar para la Salud de la Mente/Cuerpo. “Ocurre cuando las demandas que se te imponen superan los recursos que tienes. No tienes energía.”
Domar señala que la diferencia con el agotamiento es que el burn out es más permanente, el agotamiento puede deberse a un mal día de trabajo, cuando las cosas no han salido bien, pero el burn out es más permanente y ese día malo de trabajo se extiende a una semana o meses.
¿Cuáles son los signos de agotamiento?
El trabajo ya no te entusiasma
Uno de los signos reveladores de agotamiento es la falta de interés o entusiasmo por lo que haces en tu trabajo. Incluso los proyectos que solían entusiasmarte ahora te dejan completamente agotado. «No obtienen el mismo nivel de satisfacción», este es un síntoma de burn out. No obtienen la misma satisfacción incluso si les va bien.
En el peor de los casos, esta actitud de indiferencia puede extenderse más allá de yu trabajo e impactar negativamente tu interés en varios aspectos de tu vida fuera de la oficina. Este es un síntoma al cual debes poner atención porque si se extiende a otros ámbitos de la vida podrías caer en estados depresivos que van más allá de un estado de agotamiento permanente, por ello, en esos casos es mejor hablar con especialistas para tratar el tema.
Ya no pones esfuerzo en lo que haces
Esa falta de entusiasmo conduce directamente a una actitud negativa o apática en el trabajo y realizas las cosas sin esfuerzo. Es como si nada te importase, piensas: voy a ir a trabajar y hacer lo mínimo para sobrevivir. No te pondrás centrado en las cosas, no saldrás de tu zona de confort para mejorar el trabajo, ni mucho menos superaras las expectativas.
Muchas de las personas que sufren del síndrome de burnout son aquellas que tienen una reputación de alto rendimiento y por ello quedan agotadas, entonces se nota un alto contraste a su forma habitual de trabajar.
Baja tu rendimiento
Como es de esperar, este desinterés en las tareas diarias a menudo conduce a un peor rendimiento, porque las personas que están agotadas simplemente no se preocupan lo suficiente en hacer las cosas bien, sino sólo en hacerlas.
Si estás repitiendo los mismos errores o comienzas a cometer errores en cosas que dominabas y hacías con regularidad es un síntoma de que te “estás fundiendo en el trabajo” y debes hacer algo al respecto.
Te sientes totalmente agotado
La fatiga y la sensación general de agotamiento son indicadores claros y obvios de burn out. No solo lidiarás con la falta de energía física, sino que también puedes sentirte agotado emocional y mentalmente.
Pueden aumentar enfermedades físicas
Burnout no tiene una manifestación física en sí, sin embargo, el estado de agotamiento y estrés disminuye las defensas y provoca algunos malestares físicos tales como:
- Insomnio
- Dolor de pecho
- Dolores de cabeza
- Bajas defensas
- Taquicardias
- Falta de aliento
- Dolor gastrointestinal
- Mareos o desmayos
Por supuesto, podría también, haber una gran cantidad de otras explicaciones para este tipo de molestias, dolores y problemas. Pero si los estás experimentando junto con los cambios emocionales expuestos anteriormente, podrían servir como un indicador físico de tu estado de agotamiento.
Estás fundido en el trabajo… ¿y ahora qué hacer?
Si tienes algunos de estos síntomas ¿qué puedes hacer? Las primeras indicaciones que recibirás es hacer una pausa, tomarte unos días o semanas de vacaciones, y en algunos casos puede resultar y luego volver recuperado y con más energía al empleo.
Pero cuando las causas son más profundas, el descanso puede ayudar, pero no solucionar el problema, es recomendable ver a un especialista de la salud. La doctora Domar indica que hay que empezar por cambiar básicamente dos cosas:
- Cambiar la actitud
- Cambiar la carga de trabajo
Para cambiar su actitud, tendrás que aprender a reconocer hábitos negativos y patrones de pensamiento y trabajar para detenerlos cuando sucedan. Por ejemplo, pensar:» Tengo que hacer esto perfectamente o seré un fracaso». Cambiar estos hábitos del pensar, dice Domar.
La investigación sugiere que el perfeccionismo está muy relacionado con el agotamiento. Por lo tanto, reconocer y luego eliminar algunas de estas presiones autoimpuestas puede ayudarte a aliviar tu estrés en el trabajo.
El segundo cambio es disminuir el volumen de trabajo. El agotamiento puede ocurrir cuando simplemente tienes demasiadas tareas que cumplir. En esos casos lo que necesitas hacer es aligerar tu carga.
Acércate a tu jefe y ten una conversación sobre esto, dile que te sientes sobrecargado de trabajo e identifica formas en las cuales puedes tener una carga de trabajo más razonable en el futuro, delegando, compartiendo, cambiando horarios etc.
Debes poner atención a cuando digas sí a una nueva obligación al trabajo y saber si tienes energía para realizarla. Sobre todo si trabajas de forma independiente a veces es mejor perder algunos clientes que empeorar tu salud.
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