Soluciones naturales para dormir mejor
Dormir de manera adecuada tiene muchos beneficios para la salud. Durante las horas de sueño el cuerpo invierte energía en muchos procesos vitales. Por ejemplo, es el momento en el que el cerebro fija todos los conocimientos adquiridos en el día, potenciando la memoria. También se fortalecen y reparan los músculos y huesos, entre otras funciones. Por eso, quienes no logran descansar correctamente notan durante el día las consecuencias. Si bien no hay una clave única, hay algunas soluciones naturales para dormir mejor que pueden ayudar a aumentar la calidad de sueño.
Algunas infusiones, la aromaterapia y algunos buenos hábitos pueden ser la clave para mejorar el descanso de forma natural. Estos son algunas ideas que puedes empezar a intentar hoy mismo.
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Soluciones naturales para dormir mejor
Algunos remedios naturales sirven para potenciar el descanso. El típico té de hierbas antes de irse a dormir no es un mito. Las infusiones relajantes ayudan a alcanzar el sueño de forma más rápida y que el descanso sea más profundo y reparador.
Estos son algunos de los remedios naturales más eficientes para mejorar el sueño.
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Té de valeriana, manzanilla, melisa o hinojo
Como decíamos, las infusiones de hierbas son excelentes para mejorar la calidad del sueño. Si bien hay muchas que pueden cumplir esta función, las cuatro que más se recomiendan son valeriana, manzanilla, melisa o hinojo. El té verde puede ser una opción también, y otros como el tilo o el boldo.
Lo importante es nunca tomar té negro, porque tiene una pequeña dosis de cafeína que puede resultar contraproducente. Sea cual sea la infusión elegida, se recomienda tomarla un rato antes de acostarse, entre una y media hora.
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Leche
Tomar un vaso de leche antes de dormir también puede ser un buen remedio casero para mejorar el sueño. Pues este alimento es rico en triptófano, un aminoácido precursor de la serotonina. Es decir, que beber leche antes de dormir ayuda a reducir el estrés e irnos a la cama más relajados.
Lo ideal es beber un vaso de leche templada un rato antes de acostarnos.
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Lavanda
La lavanda es una de las soluciones naturales para dormir mejor más reconocidas. Su aroma induce al sueño, ayuda a relajar el cuerpo y favorece el descanso. Una forma sencilla de usarla para dormir mejor es echar unas gotitas de aceite esencial en la almohada. No lo hagas justo antes de dormir, sino un rato antes, para que el aroma a la hora de acostarte sea más tenue.
También puedes tener algunas flores de lavanda en la habitación, cerca de donde duermes.
Otras soluciones naturales para dormir mejor
Más allá de estos remedios naturales, también hay algunas buenas costumbres que ayudarán a que puedas dormir mejor por las noches. En general, tener hábitos saludables durante el día es una buena manera de garantizar el descanso: comer sano, hacer ejercicio, tomar agua, por nombrar las más clásicas.
Pero también hay pequeños cambios que pueden generar grandes resultados. Algunos de ellos son:
Desactivar las pantallas varias horas antes de acostarse
La luz de las pantallas no le permiten al cerebro comprender que ha llegado la hora de dormir. Por eso, lo ideal es alejarse de ellas algunas horas antes de acostarse (¡Nada de mirar el móvil justo antes de dormir!).
En caso de que te cueste demasiado hacerlo, baja el brillo lo máximo posible y utiliza la función “luz nocturna”.
Hacer un ritual de antes de dormir
La mejor manera de descansar bien es preparar al cerebro para ello. Por eso, es buena idea tener un pequeño ritual de antes de dormir. Bajar las luces, hacer un rato de meditación, tomar una infusión (de las que mencionamos antes), y una lectura, por ejemplo.
No tiene que ser ese, puedes elegir tu propio ritual nocturno. Lo importante es que sea siempre el mismo, y que al terminarlo te vayas a dormir. De esta forma, acostumbrarás al cerebro a que después del ritual llega el descanso, y este resultará más placentero.
La temperatura ideal
Puede que tengas la falsa idea de que cuanto más calor tengas en la cama, mejor dormirás. Esto no es así. Para un descanso óptimo, el cuerpo necesita bajar la temperatura. Por eso, no se recomienda dormir con pijamas demasiado gruesos. Una habitación con una temperatura cálida y cómoda, pero no excesivamente calurosa es ideal para dormir mejor.
Prepara la habitación y deja afuera las preocupaciones
Una cama bien hecha, una almohada cómoda y un espacio que te resulte agradable son claves a la hora de dormir bien. Debes convertir tu habitación en un verdadero templo del descanso si quieres un sueño reparador.
Por eso, también es muy importante dejar fuera de ella las preocupaciones. No lleves tu agenda a la cama, ni las cosas para estudiar, ni la computadora. De este modo le envías al cerebro el mensaje que necesita para descansar bien: aquí no hay lugar para preocuparse.