Virgen de los Ángeles, protectora de las Américas

Una de las advocaciones de la Virgen María más populares de Costa Rica es la Virgen de los Ángeles. De hecho, es patrona del país y declarada protectora de las Américas por el difunto papa Juan Pablo II. Su imagen se encuentra en la Basílica de Nuestra Señora de los Ángeles, situada en la ciudad de Cartago.

La devoción por la Virgen de los Ángeles es tal que, en 2005, se hizo una réplica de la imagen para llevar al Vaticano. Fue bendecida por el papa Benedicto XVI y, posteriormente, depositada en la Basílica Santa María de la Luz. Desde aquel día es constante la peregrinación de numerosos inmigrantes latinoamericanos para mostrarle su respecto.

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Leyenda de la Virgen de los Ángeles

Cartago era la ciudad más importante de los españoles, en Costa Rica, durante la época colonial. A su alrededor, existían diversos pueblos habitados por indígenas. Las leyes españolas de aquellos tiempos tenían prohibido a los mulatos y a los negros libres (llamados pardos) pasar de la Cruz de Caravaca.

En 1635, una joven, de Puebla de los Pardos, recogía leña en el bosque cuando descubrió sobre una roca una escultura de una mujer con un bebé en sus brazos. La estatua era pequeña, por lo que optó por llevarla a su casa. Una vez en ella, la guardó en un cajón.

Al día siguiente, pasó por el sitio donde la había encontrado y se sorprendió al ver de nuevo una estatua igual. Al llegar a casa, con la nueva estatua, abrió el cajón donde la había guardado el día anterior y allí no había nada. Depositó, entonces, en el cajón, la nueva estatua.

El tercer día sucedió lo mismo. Esta vez, la llevó al sacerdote Alonso de Sandoval, quien la guardó en un cofre. Cuando lo abrió, a la mañana siguiente, la imagen había desaparecido. La chica volvió al lugar donde las otras veces había encontrado la imagen y allí estaba. Se la llevó otra vez al sacerdote, quien optó por guardarla en el sagrario. Como es de suponer, al día siguiente la estatua ya no estaba.

Entendieron entonces que estaban ante un mensaje de la Virgen María, que quería comunicarles que deseaba estar en el bosque, cerca del pueblo pardo y la gente modesta. Primero, se construyó un pequeño templo, el cual iría mejorándose hasta llegar a convertirse en la Basílica de Nuestra Señora de los Ángeles.

La joven que había descubierto la estatua recibió el bautismo, bajo el nombre de Virgen de los Ángeles. La fecha fue el 2 de agosto, cuando los franciscanos hacen la celebración de Nuestra Señora de los Ángeles.

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