Virgen del Pilar, la advocación mariana más famosa de España
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Virgen del Pilar es la advocación mariana más antigua de todas. Se denomina advocación a la invocación y referencia a la Virgen María con algún nombre concreto. En este caso, dicha advocación nace cuando la madre de Jesucristo aún está viva en Tierra Santa.
Su importancia es tal que con el paso de los siglos ha ido acumulando diversos patronazgos. Así, por ejemplo, la Virgen del Pilar es patrona de Zaragoza, de Aragón o de la Guardia Civil. La iglesia inicial fue extendiéndose y mejorando con los años hasta adquirir en 1948, de la mano de Pío XII, el título de Basílica del Pilar.
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Historia de la Virgen del Pilar
No existen documentos escritos sobre la famosa aparición. Sin embargo, la fuerza de la leyenda y la tradición oral la ha perpetuado en el tiempo. Corría el año cuarenta tras el fallecimiento y resurrección de Jesucristo. El apóstol Santiago recorría España intentando hacer llegar a sus habitantes el mensaje de su Maestro.
Pero la población no estaba receptiva a la evangelización y el apóstol se encontró contra un muro casi infranqueable. Viendo la desesperación del evangelista, la Virgen María se le apareció para animarle en su difícil tarea. Tal aparición ocurrió en Zaragoza, el dos de enero del citado año cuarenta.
La importancia del hecho, aparte de la aparición en sí, es que tuvo lugar cuando la Virgen María aún estaba viva. Residía por aquel entonces en Tierra Santa. Pero vio tan necesitado de ayuda al apóstol Santiago que no dudó en aparecérsele. Como testimonio de aquella aparición quedó una columna de jaspe que rápidamente recibió el nombre de el Pilar.
Tras el suceso, Santiago, ayudado por las siete primeras personas que había convertido, elevaron una sencilla capilla de adobe en la orilla del Ebro. En el Archivo del Pilar está custodiado un manuscrito de 1297 que recoge este momento.
Basílica de la Virgen del Pilar
Sobre la pequeña iglesia preexistente se construyó una románica tras la reconquista de Zaragoza por parte de Alfonso I el Batallador. Tiempo después, tras diversas restauraciones, se convirtió en la colegiata gótico-mudéjar de Santa María la Mayor. En el año 1948, Pío XII le daría el título de Basílica del Pilar.
En el siglo XVIII la nombraron patrona de todos los pueblos Hispanoamericanos. Hecho que dio lugar a que a principios del siglo XIX algunos gobiernos de Hispanoamérica enviaran sus banderas a la basílica para que el manto protector de la Virgen mantuviera a salvo a sus países. Actualmente aún siguen colocadas estas banderas en el templo.
La Virgen del Pilar es la advocación mariana más antigua y desde su basílica de Zaragoza nos protege bajo su manto sagrado.
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